Marta Meza, rectora CFT estatal R. Arica y Parinacota: “Sería una muy buena iniciativa poder contactarnos con las escasas rectoras que existen en las universidades estatales”

AULA MAGNA conversó con la rectora del CFT estatal de la Región de Arica y Parinacota, Marta Meza Lavín, quien además es vicepresidenta del Consejo de Rectores de los CFTs estatales de Chile. En la entrevista, Meza realiza un análisis del funcionamiento de la institución que dirige, sus avances en el corto tiempo que lleva de apertura el establecimiento, detallando también la realidad de la región. Así como también señala el rol femenino en dirigencias que históricamente han liderado hombres, y lo complejo que fue abrir el CFT en medio de una pandemia, entre otras materias.

EDUCACIÓN Y CENTROS DE FORMACIÓN TÉCNICA (CFTs) EN PROPUESTA DE LA NUEVA CONSTITUCIÓN

¿Cómo califica el rol de los CFTs en la propuesta de nueva Constitución, entendiendo que estas instituciones formarían parte del Sistema Nacional de Educación? ¿Cumple con sus expectativas y principios en torno a la educación?

“Junto a tres rectores, participamos en ingresar una iniciativa a la Convención Constitucional y creemos que la iniciativa que ingresamos como rectores de CFTs estatales está cubierta por la propuesta de la Nueva Constitución, donde se habla que existe un sistema nacional de educación pública de carácter estatal y gratuita. Personalmente como rectora de un CFT estatal, siento que mis expectativas de lo que espero en materias de la propuesta de Nueva Constitución, están satisfechas en beneficio de las y los estudiantes actuales y futuros estudiantes”.

¿Cuál es su análisis respecto al derecho a la educación expuesto en el borrador constitucional? ¿Cree usted que el nuevo orden constitucional responde a las demandas del movimiento estudiantil y de las diferentes instituciones de educación de nivel superior?

“Bueno, la Universidad de Chile logró ingresar una iniciativa a la Convención que fue ingresada con patrocinio. Y la nuestra, de los CFTs estatales, fue ingresada con el patrocinio de nueve convencionales. En el caso de la Universidad de Chile ingresó con más de 15 mil firmas que suscribieron a dicha iniciativa, por lo tanto, siento que sí se está cumpliendo con la expectativas y creo que es un rol del Estado el poder asegurar el derecho social en educación a todos y todas quienes quieran y deseen estudiar en la educación pública”.

Como vicepresidenta de los Centros de Formación Técnicos Estatales de Chile (CFTECh), ¿se ha evaluado incorporar las humanidades en los procesos formativos de las distintas carreras que ustedes imparten?

“Lo que sucede es que hoy en día las humanidades sí están en los centros de formación técnica estatales. Hay muchas instituciones que están impartiendo carreras del área humanista, educación y humanidades. Particularmente, este CFT (R. Arica y Parinacota) tiene aún estudiantes cursando carreras de educación y humanidades. Nosotros vamos a la inversa, pues el CFT estatal surgió de un proceso de armonización con el CFT de la U. de Tarapacá, en donde iniciamos el año pasado (2021) con 19 carreras y este año tenemos 13, y el directorio -a propuesta de la rectora- suspendió admisión en seis carreras de las cuales dos son del área de la administración, una del área de la educación y una de las humanidades, más otra del área de la tecnología que era necesario actualizarla y reconvertirla en otra carrera que sea necesaria para la necesidad productiva y económica de la región. Pero sí hoy día no es una discusión de que existan o no existan (las carreras de humanidades) es porque lo que sucede es que la mayoría de los CFTs estatales están ubicados en comunas de la periferia de la capital regional en las que se requieren carreras técnicas del área humanista y de la educación para poder atender las necesidades y requerimientos de capital humano de esas áreas en comunas pequeñas, que no existen formación porque el sector privado no se va a lugares donde hay poca matrícula.

Lo anterior, no lo respondo como vicepresidenta del Consejo de Rectores de CFTs estatales, sino que desde mi perspectiva como rectora y solamente dando un dato de la causa”.

CFT ESTATAL DE LA REGIÓN DE ARICA Y PARINACOTA

¿Qué significado tiene para usted ser rectora en un mundo, el de la educación superior, con rectores mayoritariamente masculinos? ¿Una rectora aporta un sello diferenciador o se trata de una gestión más bien semejante?

“Primero hay que decir que los hombres y las mujeres somos distintos, pertenecemos a géneros distintos, por lo tanto la forma en cómo miramos la vida y cómo abordamos -desde la gestión obviamente- es diferente, por nuestras cualidades y características y siento que sí he podido aportar en esta mirada; pero también decir que esta rectora es una persona y una profesional mujer que ha desempeñado infinitos cargos en el ámbito público y político en áreas que han sido siempre destinadas a los hombres. En mi experiencia como rectora yo vengo aportando a la educación superior desde hace ya siete años. Llevaba cinco años en el centro de formación técnica de la Universidad de Tarapacá y ahora llevo dos años como rectora de CFT estatal, de tal forma que mi experiencia, mi mirada y mi perfil de mis condiciones que me aporta mi género, ha sido una ventaja. Siento que ha sido una ventaja en términos de cómo miramos nosotras los sistemas y siento que mi mirada ha sido un aporte”.

 ¿Tiene contacto con las rectoras universitarias? ¿Qué valor tendría a su juicio una red de mujeres directivas en educación superior?

“Primero decir que con las rectoras universitarias no nos hemos relacionado, no hemos tejido redes, pero sí las tres rectoras de los CFTs estatales somos bastante cómplices en nuestras decisiones, compartimos mucho más, al igual como con el resto de los rectores, pero hay mayor afinidad con las mujeres. Creo que sería una muy buena iniciativa poder contactarnos con las escasas rectoras que existen en las universidades estatales, de tal manera de poder compartir nuestras experiencias profesionales, personales, en el ámbito público y directivo”.

¿Cuál es el sello educacional de la Región de Arica? ¿A qué objetivos o fines está orientada la oferta académica que ofrece dicha entidad?

“Primero decir que nosotros formamos personas íntegras para que se inserten en el mundo laboral con las competencias técnicas requeridas que les permita buen desempeño y que se transformen, una vez insertos en el mundo laboral, ser un aporte en la institución; pero además de eso, nuestro sello es contribuir a la movilidad social en el territorio y decir que nuestra responsabilidad -para los fines que fuimos creados- es también dar respuesta a las necesidades de capital humano en el territorio de acuerdo a lo que requiera el sector privado, público y privado con carreras pertinentes que aporten finalmente y que contribuyan al desarrollo de la región”.

El CFT Estatal de la Región de Arica tiene un alcance regional y apuntan a suplir las necesidades locales. En este sentido, ¿cuáles son esas necesidades en la zona en que se ha instalado? ¿Han pensado ampliar la gama de carreras o abrir más sedes?

“Primero indicar que tenemos que ser muy responsables, pues yo te indicaba hace un rato que nosotros suspendimos admisiones en seis carreras, las que podrían haber representado para este CFT alrededor de 400 estudiantes matriculados; pero no se trata de tener más o menos matrículas, sino que se trata de cumplir para los fines para la cual fue creada la educación técnica a nivel superior en el territorio. Y lo que hemos hecho, y seguiremos haciendo, en una alianza estratégica y vinculamos directamente con el sector económico productivo, privado y también del sector público, es generar carreras que atiendan la necesidad del territorio. Nosotros recién aperturamos la actividad académica el 2021 con 19 carreras, y el 2022 aperturamos con 13, de las cuales seis de las 19 salieron, y nosotros ahora con 13 teniendo dos carreras nuevas en nuestra oferta 2022, las que tienen que ver con áreas que no estaba cubiertas por nuestra institución y que se requiere en nuestro territorio. Por ejemplo, en el área de la administración: gestión de recursos humanos, aquí en la región, ese capital humano no estaba siendo formado por ninguna institución técnica y la otra carrera es una carrera también muy requerida, pues hoy día la tecnología es lo más importante para los procesos productivos y aperturamos con la oferta académica de la carrera técnico nivel superior en mantenimiento electromecánico.

Todo también conversado con el mundo privado y ahora nos encontramos preparando oferta académica en dos carreras nuevas, también relacionadas con el perfil de la región, una que tiene que ver con la Cámara Chilena de Construcción, es la carrera de técnico superior en obras civiles. Y obviamente esta es una área de desarrollo de la región, muy importante, toda vez que somos una región nueva y en múltiples requerimientos de infraestructura tanto privada como pública, y hemos llegado a la convicción en conjunto con la Cámara y donde tenemos alrededor de seis empresas, quienes dirigen estratégicamente la empresa del área de obras civiles, es nuestro consejo asesor y con ellos estamos diseñando y modelando la carrera; misma situación en una carrera que estamos también diseñando donde también tenemos expertos contratados para eso, que está directamente relacionada con una aspiración de la región -que hoy es una realidad y una necesidad- que es el área turismo. Y una de las áreas de turismo que ingresa recursos a la región y que no estaba profesionalizada es el área de guía de turismo en intereses especiales, toda vez que los mayores recursos que llegan a la región por el área de turismo son en intereses de turistas de larga distancia: europeos y norteamericanos. De tal forma que estamos ahí avanzando y nuestra responsabilidad es formar técnicos que también tengan en su futuro inmediato, una vez terminadas las carreras, empleabilidad que es una responsabilidad nuestra”.

¿El CFT de la Región de Arica tiene vínculos formales con universidades estatales, universidades privadas y/o empresas? De no tenerlos, ¿aspira a que existan y por qué?

“Nosotros traemos una trayectoria, donde venimos del CFT de la Universidad de Tarapacá con una historia. En esa misma línea, nosotros como institución de educación superior técnico profesional, tenemos vínculos estrechos y convenios de articulación con los establecimientos de enseñanza media técnico profesional (EMTP) de la región, en donde nosotros hacemos reconocimientos de los aprendizajes previos y de los avances y trayectorias formativas de los estudiantes de la EMTP. También estamos tejiendo lazos y trabajando con la Universidad de Tarapacá que es la universidad tutora del CFT estatal de Arica y Parinacota para fortalecer vínculos académicos que permitan establecer mayor reconocimiento del avance y trayectoria académica de nuestras y nuestros técnicos que quieran optar a estudios universitarios. Nosotros no formamos técnicos para que vayan después a la universidad. Formamos técnicos para insertarlos al mundo laboral, pero no solo para eso sino que pueden ser sus propios empleadores y levantar emprendimientos. Nos relacionamos también, nos vinculamos bidireccionalmente con el sector productivo y con el mundo de los empleadores públicos y privados en alianzas que nos permiten una vinculación efectiva para así poder evaluar y retroalimentar, en primer lugar, el quehacer en nuestras y nuestros estudiantes en tanto sus competencias laborales para prepararlos para el mundo definitivo en el que se van insertar. Y con eso aseguramos su perfil de egreso pero también los vinculamos con el sector económico productivo público y privado para el diseño de la actualización curricular de las carreras para afianzar y modificar, si corresponde, los perfiles de egreso o dejar de impartir carreras si correspondiera. Y también para aperturar la oferta académica, trabajando en conjunto con nuestros informantes claves, nuestro consejo de asesores que en este caso vienen a ser con quienes nos relacionamos bidireccionalmente en búsqueda de cumplir estos propósitos que te mencionaba”.

Desde que asumió el cargo como rectora, ¿cuál es su análisis en torno a los objetivos que la institución se planteó inicialmente?

“En primer lugar decir que esta es una institución que no es comparable con otros CFTs estatales porque nuestra forma de aparecer en el mundo y nacer al mundo público como CFT estatal, pues partimos de un proceso de armonización; ya que venimos del CFT de la Universidad de Tarapacá, el cual está en su último proceso de cierre y lo que hicimos fue un proceso de armonización que fue exitoso. Toda vez que del CFT de la U. de Tarapacá el año 2021 decidieron terminar su carrera ahí 1.504 estudiantes, sumados al primer proceso de admisión del CFT estatal, que permitió iniciar las actividades académicas con 2.397 estudiantes matriculados. Y obviamente nuestra mayor preocupación fue poder trabajar y poder retribuir la confianza de esas y esos estudiantes, en poder acompañarlos en su trayectoria formativa para que puedan avanzar exitosamente en ella y es así que la corte de estudiantes del CFT de la U. de Tarapacá que ingresó al CFT estatal a realizar su práctica profesional práctica laboral, el 89% de las y los estudiantes se tituló y los que no, se matricularon con nosotros este año para continuar y terminar su proceso que por diversas razones tuvieron que suspender el año pasado. En misma situación con los estudiantes que ingresaron de la corte 2020 del CFT de la U. de Tarapacá y que ingresaron al CFT estatal a cursar su tercer y cuarto semestre 2021, el 95% continuaron y están matriculados con nosotros el 2022. Por lo tanto, nosotros podemos decir que nuestros propósitos y objetivos han sido exitosos y cumplidos en cabalidad; misma situación que hemos trabajado para poder sacar adelante y acompañar en sus procesos formativos a los estudiantes que se matricularon y confiaron en el proyecto educativo que presenta la comunidad en el general de la región de nuestro CFT estatal”.

Respecto a la intermitencia del confinamiento del 2021 ¿cuáles han sido los mayores desafíos que se enfrentaron? ¿Qué aprendizajes o nuevas convicciones ha formado u obtenido tras este proceso? Considerando además que desde el 2021 funciona el CFT Estatal de Arica.

“El mayor desafío fue el derribar los paradigmas que existen en torno a que no es siempre posible llevar adelante procesos formativos desde la virtualidad. Realizar estos procesos formativos desde una pantalla. Tuvimos que adecuarnos a este mundo distinto e interactuar con nuestras y nuestros estudiantes a través de una pantalla, lo que significó prepararnos para aquello, redoblar esfuerzos en acompañar y entregar herramientas, en primer lugar, para nuestras y nuestros docentes, entregándoles herramientas tecnológicas para trabajar de manera sincrónica los procesos de aprendizajes y también atendiendo de manera especial a nuestras y nuestros estudiantes para que puedan sacar adelante estos procesos formativos; es decir, que los que tuvieron mayor dificultad en esto fueron los estudiantes que ingresaron a primer año al CFT estatal, porque la mayoría de ellos y ellas, no son la imagen que se proyecta la mayoría de las personas cuando se habla de educación superior. Pues la mayoría de nuestros y nuestras estudiantes son personas mayores de 22 años que después de haberse alejado de las aulas por dos, cuatro o más años, deciden darse una oportunidad y poder optar, darse el desafío de tener un título técnico. De tal manera que cuando tú has dejado de estar por un tiempo alejado del mundo de los estudios, de la sistematización en proceso, es mucho más difícil; a diferencia de los que venían del CFT de la U. de Tarapacá que ya estaban adecuados, ya que habían estado desde fines del 2019 online y todo el 2020, así que llegaron el 2021 a continuar su proceso en una modalidad más familiar.

Uno de los desafíos que tuvimos que asumir fue también entregar apoyo digital, herramientas tecnológicas a las y los estudiantes; realizando inversiones para que pudiesen tener equipo, sobre todos para los que no tenían notebook, tablet y así pudieran participar en las clases online, en un primer momento que fueron absolutamente online y en el segundo semestre del 2021 nosotros retomamos la presencialidad, primero de forma híbrida y con el 80% de la población estudiantil vacunada, volvimos 100% a la presencialidad. Por lo tanto, ha sido todo un proceso de ajuste, de aprendizaje y creo que ha sido muy importante para todos y todas que es posible llevar adelante estos desafíos, pero nos dio mucha alegría el poder recibir en agosto del año pasado de vuelta a nuestros estudiantes y reconocernos y podíamos comunicarnos de una manera distinta desde la presencialidad. Sin embargo, igual sacamos adelante la tarea, y las y los estudiantes terminaron en un porcentaje sobre los promedios nacionales su año académico durante el 2021”.

¿Qué características presenta la educación de calidad que ustedes promueven como asociación? ¿Cuáles son sus criterios o estándares de calidad?

“Primero decir que toda la valoración e importancia que tiene para nosotros el poder realizar un proceso de aseguramiento en el cumplimiento de lo declarado en nuestras políticas y mecanismos, tanto los procesos de docencia que teniendo, en primer lugar, siempre el proceso de aprendizaje de las y los estudiantes, y en una gestión institucional que norme y regule las correspondientes áreas. Nosotros hemos estado durante todo el 2021, porque como crecimos tan grande, comenzamos a impartir actividades académicas faltándonos como CFT estatal mucha normativa y ha sido todo nuestro esfuerzo durante todo el 2021, y aun continuamos en ese en ese proceso, en poder asegurar, regular y ordenar las políticas y mecanismos que nos permitan regular nuestra gestión, en el área de docencia y gestión institucional, para que le pueda dar sustento a los procesos y poder lograr el desarrollo integral de nuestra institución y con ello, el cumplimiento de los mecanismos estratégicos. Y también este modelo de aseguramiento tiene que ver con que al estar normado y regulado, el poder realizar todos los ajustes necesarios para la mejora continua y asegurar; impartir docencia cumpliendo con las expectativas y los procesos que se requieren tanto en la parte de los contenidos que tienen que recibir los estudiantes. Pero principalmente en el desarrollar las competencias, donde el modelo educativo al que nosotros adscribimos, toda vez que no transmitimos conocimiento sino que impartimos en saber, saber hacer y el saber ser en los ámbitos en que el estudiante le corresponderá desempeñarse al momento que salga definitivamente al mundo laboral”.